Metidos en Carretera
En abril de 1995 la revista Tráfico publicó un reportaje sobre las carreteras gestionadas por el Principado de Asturias, incluido en una serie de informes sobre las carreteras autonómicas. Se puede consultar este documento en el siguiente enlace.
Al tratarse de una Comunidad Autónoma uniprovincial, el Principado de Asturias asumió en 1982, conforme a lo establecido en el Estatuto de Autonomía, la titularidad de los 2.229 km de la antigua red provincial de carreteras, a cargo de la extinta Diputación Provincial de Oviedo. Dos años más tarde fueron transferidos al Principado 2.050 km de carreteras que hasta entonces tenía a su cargo el MOPU en Asturias. La red estatal, que en 1980 tenía una longitud de 2.629 km en Asturias, quedó reducida a 604 km, si se excluye la concesión de la autopista de peaje León-Campomanes. En su conjunto, la red autonómica constituía una malla extensa y heterogénea, con un fuerte grado de descapitalización, que precisaba una cuidada gestión para adecuarla a la exigencias demandadas por la sociedad asturiana.
En 1986, la Ley de ordenación y defensa de las carreteras del Principado estableció la clasificación de las vías comprendidas en la Red de Carreteras del Principado de Asturias, todas ellas titularidad del Principado:
En 1987 el Consejo de Gobierno del Principado aprobó la adscripción de las carreteras del Principado a estos grupos de clasificación, conforme al esquema viario definido por el Plan Regional de Carreteras. Posteriormente, en 1989 se modificó la denominación de las carreteras fijándose un nuevo criterio de catalogación con la sigla "AS" y un código numérico formado por un primer dígito que identifica el tipo de red (el 1 para la red regional, el 2 para la red comarcal y el 3 para la red local de primer orden) seguido del ordinal correspondiente a la carretera según la localización de su origen de oeste a este. Para la red local de segundo orden se utilizaron las siglas distintiva de cada concejo, con el ordinal de la carretera dentro del mismo.
El primer Plan Regional de Carreteras fue aprobado por el Consejo de Gobierno del Principado en octubre de 1986 con el objetivo de modernizar la red viaria, adaptándola a la demanda de transporte prevista a medio y largo plazo, e incrementar la eficacia y agilidad en la gestión de las carreteras regionales. De igual manera, constituía un instrumento necesario para la estructuración territorial de Asturias.
El Plan se fundamentaba en tres trabajos básicos: el inventario de características de la red, el plan regional de aforos y el análisis funcional y diagnóstico de la red. Estos estudios permitieron establecer una clasificación de la red en los tres niveles citados anteriormente, definir una red horizonte para el año 2000 y elaborar un programa de actuaciones para el periodo 1986-1991.
Las actuaciones planteadas se agruparon en cuatro programas:
Se estimaba que la inversión necesaria para ejecutar las actuaciones previstas era de 33.354 millones de pesetas de 1986, de los que 5.054 se destinaban a la construcción de 40,7 kilómetros de nuevas carreteras. Sin embargo, la transformación planteada se basaba en la mejora de las vías existentes, por lo que el programa preveía el acondicionamiento general de 228,8 kilómetros y el parcial de otros 242,4 kilómetros, con un presupuesto estimado de 10.541 y 4.399 millones, respectivamente. El programa de mantenimiento y refuerzo de firmes se extendía a 1.160,0 kilómetros, que requerían una inversión de 13.360 millones de pesetas.
Entre las actuaciones del Plan destacan la nueva carretera Pravia-Cornellana, Ujo-Moreda, la conexión de la autopista Y con Veriña en Gijón, la variante del corredor del Nalón en Langreo y la conexión entre Riaño y Olloniego por Tudela Veguín. Por su parte, el programa de acondicionamientos actuó sobre el eje del Narcea y las carreteras Cangas de Onís-Panes y Posada de Llanes-Robellada.
Como continuación a este primer Plan, en 1994 se puso en marcha el II Plan Regional de Carreteras 1994-2001 con una inversión prevista de 92.000 millones de pesetas distribuida en nueve programas. Se destinaban 11.480 millones a la construcción de 28,7 km de nuevas vías, 4.800 millones a la ejecución de 15 km de nuevas variantes, 14.329 millones al acondicionamiento general de 124,6 km y 16.935 millones a acondicionamientos parciales en otros 307,9 km. Además, se contemplaba el refuerzo del firme en 1.000 km con un importe total de 26.000 millones de pesetas. El resto de inversión se asignaba a los programas complementarios de seguridad vial, conservación ordinaria mediante contrata, parques y conservación ordinaria por gestión directa y gestión de la red y apoyo técnico.
El programa de nuevas carreteras incluía la construcción de las primeras vías de doble calzada autonómicas, en concreto se trataba de la duplicación de calzada de la AS-17 entre Posada de Llanera y Lugones y la AS-18 entre Porceyo y la ronda de Gijón. También asignaba una partida para las expropiaciones de la nueva autovía AS-17 entre San Miguel de la Barreda y Riaño, actuación cuya financiación y ejecución asumió en principio el Ministerio de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente, para lo que suscribió un Convenio, que además contemplaba la inclusión en la Red de Carreteras del Estado de esta vía y la nueva carretera de Olloniego a Riaño. Sin embargo, la puesta en marcha del Plan de la Minería del Carbón y Desarrollo Alternativo de las Comarcas Mineras (1998-2005) supuso la financiación con cargo al Estado de la autovía Mieres-Gijón, y quedó en suspenso lo establecido en este acuerdo.
Última actualización: 15 de junio de 2019
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